septiembre 20, 2007

Dos regalos





Y después del regalo de la vida, y del amor ¿Hay algo más grande que los abuelos? ¿Y que los hermanos? Siempre, a lo largo de mi vida, he estado muy orgullosa de dos cosas:

La primera, que tenía a los 4 abuelos, que eran amigos y que iban a todos los lados juntos. Sabía que era afortunada porque, salvo mis hermanos, nunca conocí otra niña que pudiera decir lo mismo. El mejor regalo de la semana, era cuando salía del colegio y veía a los 4 esperándome en la puerta para llevarme a tomar un chocolate con churros. Además de caramelos y chocolate -que me volvía loca- me daban un inmenso cariño, toda la ternura que tenían acumulada, me enseñaron a hacer trampas jugando a las cartas y me hacían reír sin parar.


La segunda, mis dos hermanos. Es tan infinito el amor que siento por ellos que cualquier palabra que trate de poner se va a quedar corta. Son mis hermanos y para mí esa palabra lo encierra todo. Me han enseñado muchas cosas, me han cuidado, protegido, me han divertido, me han sacado a ver el mundo, me enseñaron a comprender el mundo de los adultos (aún tengo preguntas por haceros ;-), y con ellos he vivido todo tipo de emociones, me refiero desde el corazón. Les he echado de menos cuando se han ido, desde pequeña, que lloraba cuando no estaban. Ahora ya no lloro (bueno, a veces un poco sí) pero soy más feliz cuando os siento cerca, cuando estamos juntos. Sois un regalo. Todo eso, y mucho más. Ahora sé que siempre estaréis conmigo, en mi corazón, ocupando un espacio enorme (os he puesto unos colchones cómodos para que podáis tiraros siempre que queráis, y un minibar, que sé que os gusta mucho divertiros, pillines). Aun así, me sigue gustando veros, que estemos juntos también físicamente (jeya gueya, jey...)
Así que hoy, quiero agradecer a la vida, y al amor, estos dos inmensos regalos: mis cuatro abuelos, mis dos hermanos (bueno, ahora ya somos tres, que también tenemos a Chus).


GRACIAS.


1 comentario:

carmen dijo...

Es cierto, qué bonita es nuestra familia y que suerte hemos tenido y tenemos, teniéndonos. Especialmente ahora, que, en sustitución a nuestro hermano difunto tenemos a nuestra gran hermana mayor de las hermanas pequeñas, CHURRUIZ!
Gracias Viki, por ese hueco en tu corazón, ya sabes que en el mío también estás, tú y todos los del clan de gitanos que formamos esta genial familia.