agosto 17, 2007

Sin chistera

He conocido a dos magos. Él tiene los ojos azules y ella los tiene verdes. Hablan un lenguaje que todos podemos comprender aunque nunca antes lo hayamos hablado ni escuchado, se llama humanés. Con el lenguaje humanés llegan directos al corazón de la gente y le sacan la sonrisa. He conocido a dos magos. Son feroces, traviesos y tiernos al mismo tiempo. Su magia es buena, logran sacar lo mejor de la gente, y funciona, lo he visto con mis ojos negros. No llevan chistera ni juegan con cartas, no hacen que la gente se ponga a cuatro patas ni que ladre. Son sencillos, no llevan adornos, son lo que son y son lo más grande. Si te tocan sientes su energía y si te sumerges en sus palabras te pueden llevar al trance. He conocido a dos magos. Y he visto cómo les ponían alas a la gente. Alas suaves, como de aceite de oliva, pero invisibles. Y he visto a la gente salir volando después de pasar un rato con ellos, y volaban mirando al frente, tocando el cielo; y cuando han vuelto la cara hacia atrás ha sido solo para mandar una sonrisa, como una confirmación, un susurro: "Me siento bien. Gracias"