septiembre 05, 2007

Trasplante

Podríamos trasplantarnos el corazón, tú podrías ponerte el mío y yo el tuyo. Podríamos cambiarnos la piel, tú mudarte a la mía y yo a la tuya. Cambiarnos los pies: tú andarías con mis zapatos y yo con los tuyos. El pelo: tú te acariciarías el mío y yo el tuyo. Los ojos: tú mirarías con los míos y yo con los tuyos. No hablo de un trasplante para el resto de la vida. En esta vida tú estás aquí para ser tú y yo para ser yo. Me refiero solo a hacerlo un rato, lo necesario para comprender más allá de la fusión . Para respetarte como eres, para admirarte.